La semana que viene entramos en el menguante de diciembre, época por excelencia para sembrar los ajos. Plantaré unos ochenta dientes que ya tengo al fresco oreándose. Por cierto, están carísimos (6 euros el kilo). El corazón de las cabezas, que suelen tener 5 o 6 dientes pequeños y no suelen dar cabezas gordas, los plantaré para ajetes.
Los mojaré con oxicloruro de Cu y los plondré en un bancalito que tengo ya limpio, mullido y espolvoreado de ceniza.
¡Qué ansia! Y eso que todavía no ha empezado el invierno, aunque aquí ya llevamos una temporada amaneciendo con el suelo congelado.
¿Sembrais ajos vosotros?
Los mojaré con oxicloruro de Cu y los plondré en un bancalito que tengo ya limpio, mullido y espolvoreado de ceniza.
¡Qué ansia! Y eso que todavía no ha empezado el invierno, aunque aquí ya llevamos una temporada amaneciendo con el suelo congelado.
¿Sembrais ajos vosotros?